La canción de los nombres olvidados

LA CANCIÓN DE LOS NOMBRES OLVIDADOS
	TÍTULO ORIGINAL	The song of names
	AÑO	2019
	PAÍS	Canadá
	DIRECTOR	Francois Girard
	DURACIÓN	1h 32 min
	REPARTO
	Tim Roth, Clive Owen

Buscando por ahí encontré esta película...sin ninguna expectativa; por las "reseñas/críticas" la idea inicial fue "otra película sobre el holocausto", un lugar común que no niego ha ofrecido una que otra obra cinematográfica maravillosa...afortunadamente, la película por sí sola cambió esa idea inicial y confirmó lo tóxico que puede ser una "crítica" pontificadora...

El director, Francois Girard, inicialmente no me dijo nada (confieso mi ignorancia ante los más conocedores)...una filmografía corta destacando El violín rojo (1998) y El coro (2014), pero lo que realmente me llamó la atención fue su trabajo con el Circo del Sol, dirigiendo dos (2) espectáculos: ZED y ZARKANA; este canadiense lleva más de 20 años en el mundo del espectáculo...

Con El violín rojo y El coro demuestra este director canadiense, que lo suyo es contar historias teniendo como eje central la música...en La canción de los nombres olvidados cuenta con la colaboración de Howard Shore otro canadiense, compositor, reconocido por realizar las partituras de la trilogía de El señor de los anillos, El hobbit y un sin fin más, incluyendo las de la  mayoría de las películas de David Cronemberg...la película esta basada en la novela del crítico de música clásica Norman Lebrecht...cuenta con las actuaciones principales de Tim Roth, habitual en el cine de Quentin Tarantino,  y Clive Owen...

La historia inicia con la desaparición de Dovidl, virtuoso del violín, momentos antes de dar su primer concierto sumiendo en la tristeza a su familia adoptiva,  especialmente a su "hermano" Martín. Tras un salto temporal, una casualidad hace que Martín se de a la tarea de saber qué paso con quien fuera su "hermano"... La película narra dos épocas: la primera, el inicio de la segunda guerra mundial,  reconstruyendo la amistad de Martin y Dovidl a través de flashbacks, y la segunda a mediados de los años ochenta donde Martín se da a la tarea de saber qué fue de su amigo de juventud Dovidl...   

Es un ejercicio de memoria a través de unos ocres flashbacks en donde la relación de estos dos personajes se va construyendo desde la fatalidad...el padre de Dovidl, judio residente en Varsovia, deja al cuidado de la familia inglesa de Martin a su hijo...esta separación, debido a la guerra, marca un antes y un después en la vida de  Dovidl... aunque la familia de Martin lo toma como su hijo propio, Dovidl no olvida sus raíces, añorando a sus seres queridos a través de una fotografía de la que no se separa nunca,  enfrentando la angustia de no saber qué fue de ellos en su natal Polonia...gracias a la tutoría de su padre adoptivo, Dovidl continua cultivando su virtuosismo con el violín y estrechando lazos con Martin...pero sin olvidar a su familia.

Paralelo a esto, se muestra a un ya adulto Martin triste, realizando un viaje para saber de su "hermano"... la melancolía está presente en el ambiente, desde un gris azulado y lluvioso Nueva York  hasta una Varsovia nostálgica... Tengo entendido que es la primera vez que se filma en las ruinas de Treblinka por lo que las imágenes son únicas...algo realmente conmovedor...unas imágenes luchando contra el olvido...olvido que hoy en día nos tiene condenados, porque recordar es difícil y doloroso. El trabajo de fotografía es espléndido, armonioso con la música que acompaña las imágenes...no es para menos, la música en las obras de este director canadiense es catártica y, particularmente en esta película, además, un instrumento de memoria...      

La guerra, la familia y la religión, temas sobre lo que es mejor no discutir por lo íntimo y el esfuerzo crítico y de apertura que se requiere, sirven como anécdota en esta película para ahondar en la angustia generada por la pérdida y el no saber qué fue del otro, tragedia que vivimos día a día por que nos toca o porque lo vemos ya como parte del paisaje (en nuestro país sin ir tan lejos). Así como la casualidad lleva a Martin a saber qué fue de su "hermano", una casualidad lleva a Dovidl a desaparecer, ya nada importa, se entera que los suyos están muertos y los llora en una oración: el Kaddish, en su tradición judía, es la oración que recita los nombres de los muertos y con cada nombre Dovidl muere con ellos: la guerra le ha quitado a su familia y los llora en una oración.     

En contraste con la fotografía y la música, la película tiene un guión muy flojo, que apenas se sostiene, no conozco la novela y entiendo que se pueden encontrar problemas al hacer el trasvase de las letras a las imágenes, no quiero entrar en la eterna discusión, bizantina por demás, de cine y literatura, dos lenguajes diferentes con riquezas diferentes...sin embargo  hay partes de la historia sin fundamento que hace caer la película en un bache después de un gran inicio...solamente el tramo final recupera esa fuerza y no gracias al guión propiamente sino nuevamente al bello ejercicio fotográfico y musical.

Los actores que personifican a Dovidl y Martin de niños, son un acierto con unas interpretaciones más que correctas, poniendo de manifiesto una complicidad creciente...nuevamente el guión les juega una mala pasada, poniendo en su voz unos diálogos por momentos, para mí,  poco creíbles para niños de su edad...sin embargo, el ocre de las imágenes los envuelve y quedan enmarcados en unos planos muy bien cuidados lo que es una constante a lo largo del filme.  

Los personajes ya saliendo de la adolescencia prácticamente se desvanecen priorizando la tristeza, aún sin aflorar del todo, de Dovidl; las diferencias entre él y Martín son aún más notorias, diferencias más que entendibles...Ya de adultos, Tim Roth (Martin adulto) carga con el peso de la película casi que él solo; la presencia de Clive Owen  (Dovidl adulto) es fugaz, solo tiene sentido en la escena final de la película...en la que se cierra el círculo, puede ser una frase de cajón, trillada, pero está muy bien realizada sin caer en sensiblería, una escena que saca del bache en el que hasta ese momento había caído la película...el regreso al ocre, a la melancolía.

La película es un esfuerzo por reivindicar el recuerdo; dejando de lado lo que puede resultar accesorio, es la historia de una amistad y sobre todo de la angustia de no saber del ser querido, de la incertidumbre, tema que tanto nos toca actualmente...familias sin poder llorar a sus seres queridos, el llanto es dolor y tristeza pero lejos del llanto que libera y despide...  

La película fue "víctima" de la situación actual de pandemia, no alcanzó a ser estrenada en cines, y no creo que esto ocurra y menos por estas latitudes; Netflix la incorporó en su oferta pero para sorpresa no está en el catálogo colombiano...la encontré por accidente*

* En la sección de solicitudes responderé si les interesa tener la película